Bob.

"Una cosa buena que tiene la música, es que cuando llega, te olvidas de los problemas."
                                                                                                  
                                                                                                                          Bob Marley.


Abres los ojos por última vez, y lo último que ves es a dos tipos desconocidos, uno lee un libro y el otro busca algo en una pequeña mochila.
Es en el momento que pulsas el play y cierras los ojos, ya volverás a la realidad cuando llegues a tu parada, pero eso ahora no importa.
Escuchas un pequeño acorde a lo lejos que cada vez se mete más en tu cabeza, ya te sabes de memoria las pausas que hay entre cada acorde y llega el momento que estas esperando, esa voz ronca que tanto te llega al corazón, que te hace alejarte del mundo y tu mente se queda en blanco. Sólo aparecen imágenes de aquellos buenos momentos que has vivido con toda le gente a la que quieres.
Pero cada canción te recuerda a una persona, y esta en especial te recuerda a alguien muy importante en tu vida de ahora entonces te invades más aún en aquellos momentos buenos vividos y dejas de lado los acordes, la voz ronca, la letra que tanto te gusta... solo te sale una pequeña sonrisa al pensar en esa persona y en aquellos buenos recuerdos, te sientes feliz, relajado, aliviado y cuando te das cuenta ya se acabado ese tema que te estaba haciendo pasar unos minutos maravillosos y es cuando decides volver a poner esa maravillosa canción y se vuelve a repetir la misma historia, la misma sonrisa en la misma parte de la canción, como antes... todo se repite.
Pero de repente escuchas el nombre de tu maldita parada. Abres los ojos y ya no tienes a los dos tipos de antes, ahora le das al botón de pausa, pulsas el botón que abre las puertas del infierno y vuelves a poner el pie en la puta realidad.
Pero estás tranquilo porque sabes que mañana te volverá a pasar lo msimo pero con otra canción.